Restauración de “San Giovanni Battista” de Caravaggio
La Restauración de “San Giovanni Battista”, es una de las dos pinturas conservadas en las colecciones del Campidoglio (la otra es la nota Buona Ventura), en una construcción especial visible al público en la sala de Santa Petronilla de la Pinacoteca Capitolina, para ver en vivo todas las fases de la intervención.
Esta importante iniciativa, cuidada por la Sovraintendenza ai Beni Culturali del ayuntamiento de Roma, a sido posible gracias a una subvención de la sociedad SA.PAR srl y realizada por el restaurador Nicola Salini.
La correción se refiere en particular a la eliminación de las capas de protección, a la pintura oxidada y a los precedentes retoques localizados y se concluyó a final de enero de 2010.
La última limpieza de la pintura se remonta al año 1980
El San Giovanni Battista se encuentra en el Campidoglio desde 1750 y se puede considerar sín duda, una de las obras más interesantes de Caravaggio, que en este lienzo exprime brillantemente sus reflexiones sobre el naturalismo pictórico y sobre el sentimiento religioso. Actualmente toda la crítica está de acuerdo en atribuir esta obra al artista, gracias también a una detallada serie de investigaciones técnicas que han demonstrado el autenticidad de la obra.
Caravaggio pintó el San Giovanni Battista en 1602 para Ciriaco Mattei, una de las figuras más conocidas de la sociedad romana de la época; el asunto de la pintura es una clara referencia al nombre del hijo del Ciriaco, Giovanni Battista. Destinado entonces a los ambientes privados del palacio Mattei, y no como lugar de culto. El San Giovanni Battista es una profunda síntesis de las meditaciones de Caravaggio sobre la pintura religiosa. Por esta razón, el pintor utiliza, como modelo compositivo para el Battista, uno de los hermosísimos desnudos pintados al fresco por Michelangelo en la bóveda de la Capilla Sixtina, una de las obras más asombrosas y complejas del Renacimiento italiano: las grandes obras de arte- como se muestra también en este caso- no nacen de un golpe de suerte, en cambio, nacen gracias al talento, el estudio y al empeño constante.