Jardín Romano
Las excavaciones arqueológicas comenzadas en octubre de 1998 en el Jardín Romano, en el interior del palacio de los Conservadores, forman parte de las obras de reestructuración de los Museos Capitolinos, cuyo objetivo es comprobar la presencia de restos antiguos antes de proceder a la transformación del área en un espacio expositivo cubierto.
Las investigaciones han sacado a la luz algunos muros de fundación en bloques del templo de Jupiter Capitolino, parcialmente descubiertos en épocas precedentes, que permiten aclarar aspectos ligados a la técnica de construcción del templo.
El hallazgo de algunos restos de cerámica en el interior de los cimientos ha contribuido a fechar con precisión la intervención, que puede situarse en la segunda mitad del VI siglo a.C.
La continuación de las investigaciones arqueológicas en el interior del área ocupada por el Museo Nuovo, construido sobre los restos del templo más importante de la Roma antigua, dará nuevas y útiles informaciones que confirmarán cuanto ha ido emergiendo durante las excavaciones del Jardín Romano.
Del todo inesperado ha resultado el hallazgo, en una zona que ya fue excavada en siglos pasados durante la construcción y la transformación del palacio de los Conservadores, de la fase más antigua de utilización del área, que ha confirmado la existencia de un asentamiento en el Capitolio de una época anterior a la formación del primer núcleo urbano de Roma (edad de bronce reciente y final).
La excavación, realizada en colaboración con el Instituto de Paleontología de la Universidad de Roma La Sapienza, ha permitido identificar una serie de sepulturas, la mayoría de ellas infantiles, probablemente ubicadas junto a los límites del área del hábitat en la que se ha determinado una zona destinada a la elaboración artesanal los metales datada en el IX siglo a.C.
El estudio de los materiales y las diversas relaciones estratigráficas permitirá aclarar una posible función de culto del área de elaboración de metales habida cuenta de la enorme importancia religiosa del monte desde épocas muy remotas.